SIETE SEÑALES DE LA SANTIFICACIÓN DE LOS SANTOS (II)

  I.  LOS SANTOS ESTÁN SUJETADOS A LA PERSONA DE CRISTO 

 II.  LOS SANTOS ESTÁN SATISFECHOS EN LA PRESENCIA DE CRISTO 

III.  LOS SANTOS ESTÁN SATURADOS EN LOS PRECEPTOS DE CRISTO 

IV.  LOS SANTOS ESTÁN SOSTENIDOS POR EL PODER DE CRISTO 

 V.  LOS SANTOS ESTÁN SIGUIENDO EL PLAN DE CRISTO 

VI.  LOS SANTOS ESTÁN SEPARADOS AL PUEBLO DE CRISTO 

VII. LOS SANTOS ESTÁN SIRVIENDO LOS PROPOSITOS DE CRISTO 

Introducción: Una vez después de que prediqué en un campamento cristiano, una pareja de jóvenes que se veían muy descontentos llegó al frente, y querían hablar conmigo.  Me dijeron, “Nosotros aceptamos a Cristo, pero ojalá no lo hubiéramos hecho porque no estamos felices.”  Les dije que si ese era el problema, que no se preocuparan, porque no lo hicieron.  Cuando uno se entrega a Cristo, tiene paz y gozo.  Romanos 14:17 nos dice que “El reino de Dios no es comida ni bebida, sino justicia, paz y gozo en el Espíritu Santo”.

II. LOS SANTOS ESTÁN SATISFECHOS EN LA PRESENCIA DE CRISTO

La Biblia está llena de promesas de paz, regocijo, y satisfacción.  Y nos manda regocijarnos en Cristo, sea cual sea nuestra situación.  Aquí hay unos ejemplos:

(Ef 3:16-21) “¹⁶Para que os dé, conforme a las riquezas de su gloria, el ser fortalecidos con poder en el hombre interior por su Espíritu; ¹⁷para que habite Cristo por la fe en vuestros corazones, a fin de que, arraigados y cimentados en amor, ¹⁸seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura, ¹⁹y de conocer el amor de Cristo, que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de Dios”.

(Sal16:11). “Me mostrarás la senda de la vida; En tu presencia hay plenitud de gozo; Delicias a tu diestra para siempre”

(Sal 27:4). “Una cosa he demandado a Jehová, ésta buscaré; Que esté yo en la casa de Jehová todos los días de mi vida, Para contemplar la hermosura de Jehová, y para inquirir en su templo”

(Fil 4:11) “No lo digo porque tenga escasez, pues he aprendido a contentarme, cualquiera que sea mi situación”.

(1 Pd 4:16) “Pero si alguno padece como cristiano, no se avergüence, sino glorifique a Dios por ello.

(Fil 4:4–9) “⁴Regocijaos en el Señor siempre. Otra vez digo: ¡Regocijaos! ⁵Vuestra gentileza sea conocida de todos los hombres. El Señor está cerca. ⁶Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.   ⁷Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús. ⁸Por lo demás, hermanos, todo lo que es verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en esto pensad. ⁹Lo que aprendisteis y recibisteis y oísteis y visteis en mí, esto haced; y el Dios de paz estará con vosotros”.