Saturday, December 13, 2014

EL MENSAJE PARA MARÍA

 Introducción: Cristo prometió pagar el precio por nuestros pecados en Génesis 3:15: “Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente [de Satanás] y la simiente suya [de la mujer, o sea Cristo]; ésta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar”.

El Señor Jesús cumplió con la promesa (y profecía) hace 2,000 años cuando fue crucificado. 

Recordemos mientras que estudiamos este pasaje (Lucas1:26-45) que Cristo nació de la virgen María, vivió 30 años con su familia, y después de 3 años de ministerio, fue crucificado, sepultado en la tumba de José de Arremetía, resucitó el tercer día, y ascendió al cielo.  Pero antes que se fuera, prometió venir otra vez.  Esta vez El vendrá como el Príncipe de Paz.  Leemos en Isaías 9:6: “Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz”.  Los cristianos esperamos con anticipación ese día glorioso.

Vemos en el pasaje que estamos estudiando que José y María estaban registrados en la genealogía de la tribu real. Tenían toda la documentación correcta para ser rey y reina de la nación de Israel. Sin embargo, eran personas pobres y humildes, que pagaban impuestos al poder mundial—a Roma.  Esto era porque la nación no escuchó a los profetas de Dios y siguió en pecado hasta que Dios la castigó.  Hoy en día vemos que los mismos problemas siguen en el mundo, en la política y en las personas.

Necesitamos conocer el sistema de noviazgo de los judíos para entender este pasaje que estamos estudiando.  José y María están recientemente desposados.  Quiere decir que se casarán al fin del noviazgo, que generalmente duraba un año.  Todo en cuanto a la ley para el matrimonio ya está confirmado.  Ya habran firmado el contrato de boda.  Al fin del proceso de despojamiento, José llevaría a María a su casa para la ceremonia de boda, y empezarían a vivir juntos como esposo y esposa.

José y María eran jóvenes, yo pienso que posiblemente tenían unos 18 años.  Unas religiones piensan que María tenía como 16 y José 60, pero las razones que dan para esta idea no son bíblicas.

   I. LA COMUNICACIÓN DADA A LA VIRGEN MARÍA - Lucas 1:26-33
“26Al sexto mes el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret, 27a una virgen desposada con un varón que se llamaba José, de la casa de David; y el nombre de la virgen era María. 28Y entrando el ángel en donde ella estaba, dijo: ¡Salve, muy favorecida! El Señor es contigo; bendita tú entre las mujeres. 29Mas ella, cuando le vio, se turbó por sus palabras, y pensaba qué salutación sería esta. 30Entonces el ángel le dijo: María, no temas, porque has hallado gracia delante de Dios. 31Y ahora, concebirás en tu vientre, y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS. 32Este será grande, y será llamado Hijo del Altísimo; y el Señor Dios le dará el trono de David su padre; 33y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin” (Lucas 1:26-33).

A.  LA APARICIÓN DEL ANGEL GABRIEL – Lc. 1:26,27
26Al sexto mes el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret, 27 a una virgen desposada con un varón que se llamaba José, de la casa de David; y el nombre de la virgen era María” (1:26,27).

1. El Mensajero que Dios escogió – 1:26
“Al sexto mes el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea, llamada Nazaret” (1:26).

El ángel Gabriel, el mensajero de Dios, fue enviado al profeta Daniel para explicar la visión en cuanto a la venida del Cristo para ser crucificado y también cuando Cristo viene para ser coronado como Rey.  Gabriel apareció dos veces a Daniel in capítulo 8:16: “6Y oí una voz de hombre entre las riberas del Ulai, que gritó y dijo: Gabriel, enseña a éste la visión”.  Y en capítulo 9:21-22, para entendimiento, lo cual dice: “21Aún estaba hablando en oración, cuando el varón Gabriel, a quien había visto en la visión al principio, volando con presteza, vino a mí como a la hora del sacrificio de la tarde. 22Y me hizo entender, y habló conmigo, diciendo: Daniel, ahora he salido para darte sabiduría y entendimiento”.

El ángel Gabriel apareció a Zacarías para avisarle del nacimiento de Juan Bautista, el que iba a prepararle el camino a Jesús (Lc. 1:17,19).

La  tercera persona a la cual aparece el ángel Gabriel donde está mencionado por nombre es con la virgen María para explicar el procedimiento y el propósito de Jesucristo.

La Biblia no nos dice el nombre del ángel que habló con José, pero podemos es lógico suponer que era Gabriel, el mismo que había hablado con María.

Es interesante notar que las cuatro veces donde el ángel Gabriel está mencionado por nombre en la Biblia, su mensaje tiene que ver con Jesucristo--su venida al mundo, su ministerio, y su futuro reino.

2. La Mujer que Dios escogió – 1:27
“A una virgen desposada con un varón que se llamaba José, de la casa de David; y el nombre de la virgen era María” (1:27).

Aquí hay unas escrituras relacionadas al nacimiento virginal del Señor Jesucristo: 

“15Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar (Gen. 3:15).

“14Por tanto, el Señor mismo os dará señal: He aquí que la virgen concebirá, y dará a luz un hijo, y llamará su nombre Emanuel(Is. 7:14).

6Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz (Is. 9:6).

“23 He aquí, una virgen concebirá y dará a luz un hijo, Y llamarás su nombre Emanuel” (Mt. 1:23).

 “27A una virgen desposada con un varón que se llamaba José, de la casa de David; y el nombre de la virgen era María. (Lucas 1:27).

4Pero cuando vino el cumplimiento del tiempo, Dios envió a su Hijo, nacido de mujer y nacido bajo la ley, 5para que redimiese a los que estaban bajo la ley, a fin de que recibiésemos la adopción de hijos”. (Gal 4:4,5).

B.  LA ACLAMACIÓN DEL ANGEL GABRIEL – Lc. 1:28-30
 “28Y entrando el ángel en donde ella estaba, dijo: ¡Salve, muy favorecida! El Señor es contigo; bendita tú entre las mujeres. 29Mas ella, cuando le vio, se turbó por sus palabras, y pensaba qué salutación sería esta. 30Entonces el ángel le dijo: María, no temas, porque has hallado gracia delante de Dios” (1:28-30).

1. La Conversión de la Virgen María – 1:28
Y entrando el ángel en donde ella estaba, dijo: ¡Salve, muy favorecida! (1:28a).

El Señor tiene en alta estima a cada santo, cada cristiano.

2. El Carácter de la Virgen María – 1:28
El Señor es contigo” (1:28b

María vivía en la presencia del Señor.  Hebreos 11:6 enseña el carácter de la fe de una persona que anda fielmente con el Señor.  Dice, “Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan”.

3. La Consagración de la Virgen María– 1:28
Bendita tú entre las mujeres” (1:28c).

María era consagrada, santificada para cumplir esta comisión para traer al mundo al Hijo de Dios.

C. EL ANUNCIO DEL ANGEL GABRIEL - Lc. 1:31-33
“Y ahora, concebirás en tu vientre, y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre JESUS.  32 Este será grande, y será llamado Hijo del Altísimo; y el Señor Dios le dará el trono de David su padre; 33 y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin” (1:31-33).

1. El anuncio en cuanto a la redención del Cristo – 1:31
 Y ahora, concebirás en tu vientre, y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre JESUS” (1:31).

El nombre “Jesús” significa “Salvador”. 

Mateo 1:21 dice, “Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque él salvará a su pueblo de sus pecados.”

La única manera que Jesús pudo redimirnos del pecado y de perdición era morir por nosotros. Los siguientes versículos nos enseñan esto:

“Como el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos”. (Mt. 20:28).

“Porque el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su vida en rescate por muchos”. (Mar. 10:45).

Aquí hay otros versículos sobre el mismo tema de REDENCIÓN:

“Yo sé que mi Redentor vive, Y al fin se levantará sobre el polvo (Job 19:25). “Sean gratos los dichos de mi boca y la meditación de mi corazón delante de ti, Oh Jehová, roca mía, y redentor mío” (Sal. 19:14).

“Siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús” (Rom. 3:24).

 “En quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados según las riquezas de su gracia” (Ef. 1:7).

“En quien tenemos redención por su sangre, el perdón de pecados” (Col. 1:14).\

“Quien se dio a sí mismo por nosotros para redimirnos de toda iniquidad y purificar para sí un pueblo propio, celoso de buenas obras” (Tit. 2:14).

“Y no por sangre de machos cabríos ni de becerros, sino por su propia sangre, entró una vez para siempre en el Lugar Santísimo, habiendo obtenido eterna redención.” (Heb. 9:12).

“18Sabiendo que fuisteis rescatados de vuestra vana manera de vivir, la cual recibisteis de vuestros padres, no con cosas corruptibles, como oro o plata, 19sino con la sangre preciosa de Cristo, como de un cordero sin mancha y sin contaminación” (I Ped. 1:18-19).

“Y cantaban un nuevo cántico, diciendo: Digno eres de tomar el libro y de abrir sus sellos; porque tú fuiste inmolado, y con tu sangre nos has redimido para Dios, de todo linaje y lengua y pueblo y nación (Apo. 5:9).

2. El Anuncio en cuanto al reino de Cristo – 1:32,33
“32Este será grande, y será llamado Hijo del Altísimo; y el Señor Dios le dará el trono de David su padre; 33y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin” (Lucas 1:32,33).

6Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz. 7Lo dilatado de su imperio y la paz no tendrán límite, sobre el trono de David y sobre su reino, disponiéndolo y confirmándolo en juicio y en justicia desde ahora y para siempre. El celo de Jehová de los ejércitos hará esto” (Is. 9:6-7).

El ángel Gabriel apareció a Daniel hablándole del reino de Cristo.  En Daniel 8:16 dijo: “Y oí una voz de hombre entre las riberas del Ulai, que gritó y dijo: Gabriel, enseña a éste la visión”.  Y en capítulo 9, versículo 21, dice, “Aún estaba hablando en oración, cuando el varón Gabriel, a quien había visto en la visión al principio, volando con presteza, vino a mí como a la hora del sacrificio de la tarde”.

 II.  EL CUIDADO DE LA VIRGEN MARÍA - Lucas 1:34-37

A. LA CUESTIÓN DE MARÍA - Lc. 1:34
“Entonces María dijo al ángel: ¿Cómo será esto? pues no conozco varón” (1:34).

B. LA CONTESTACIÓN A MARÍA - Lc. 1:35
Respondiendo el ángel, le dijo: El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por lo cual también el Santo Ser que nacerá, será llamado de Dios” (1:35).

C. LA CONFIRMACIÓN A MARÍA - Lc. 1:36-37
“Y he aquí tu parienta Elisabet, ella también ha concebido hijo en su vejez, y este es el sexto mes para ella, la que llamaban estéril; 37 porque nada hay imposible para Dios” (1:36-37).

III. EL CONSENTIMIENTO DE LA VIRGEN MARÍA - Lucas 1:38
“Entonces María dijo: He aquí la sierva del Señor; hágase conmigo conforme a tu palabra. Y el ángel se fue de su presencia”.  (1:38)

A. LA DECISIÓN DE MARÍA - Lc. 1:38a                         
“Entonces María dijo: He aquí la sierva del Señor; hágase conmigo conforme a tu palabra” (1:38a).

B. LA DESAPARICIÓN DEL MENSAJERO - Lc. 1:38b
           “Y el ángel se fue de su presencia” (v38b).

 IV. LA CELEBRACIÓN DE LA VIRGEN MARÍA - Lc. 1:39-45

A. EL PROPÓSITO DE LA VISITA DE MARÍA – Lc.1:39a
En aquellos días, levantándose María, fue de prisa a la montaña” (1:39a)

Existen muchas especulaciones en cuanto a cuando y por qué fue la Virgen María inmediatamente a visitar a su parienta Elizabeth.  ¿Cree que ella hizo esta decisión sola, o que era un acuerdo entre ella, sus padres, y José?  ¿En que se basaba la decisión?  ¿Nos da la Biblia indicaciones?  Yo pienso que sí. 

En Lucas 1:34, María preguntó al ángel como podría tener un bebé porque era virgen. Después de explicar, l en versículos 36 y 37 el ángel le dio unas noticias que ella no sabía:  “36Y he aquí tu parienta Elisabet, ella también ha concebido hijo en su vejez; y este es el sexto mes para ella, la que llamaban estéril; 37porque nada hay imposible para Dios”.  Mencionando que su parienta que ya era de edad avanzada estaba embarazada milagrosamente le recordaría a María que tales acontecimientos habían pasado antes, por ejemplo a Abraham y Sara, aunque nunca un nacimiento virginal.  

Estoy seguro que María no fue de repente y secretamente solita en un viaje de unos 70 millas, o sea de cuatro días. Siendo la clase de señorita que era, creo que inmediatamente María les contó todo a sus padres y a José lo que le dijo el ángel.  (Por esto surgieron problemas serios en la mente de José, y llegó el ángel para explicarle la verdad de la situación.)  Ya que el ángel mencionó a Elizabeth, les dio la idea de que fuera María allá.  Sin duda José y los padres de María estaban de acuerdo, y seguramente arreglaron que alguien viajara con ella.

B. LA PROVINCIA VISITADA POR MARÍA - Lc. 1:39b
“A una ciudad de Judá” (1:39b).

Se cree que “una ciudad de Judá” en “la montaña” (Lc. 1:39)  se refiere a Hebrón, el capital de Judá, que quedaba a unas 5 millas de Jerusalén y unos 70 millas de Nazaret.  Es lógico pensar que Zacarías vivía en  Hebrón porque era la ciudad principal de los sacerdotes.

C. LAS PERSONAS VISITADAS POR MARÍA - Lc. 1:40-45
 “40y entró en casa de Zacarías, y saludó a Elisabet. 41Y aconteció que cuando oyó Elisabet la salutación de María, la criatura saltó en su vientre; y Elisabet fue llena del Espíritu Santo, 42y exclamó a gran voz, y dijo: Bendita tú entre las mujeres, y bendito el fruto de tu vientre.43¿Por qué se me concede esto a mí, que la madre de mi Señor venga a mí? 44Porque tan pronto como llegó la voz de tu salutación a mis oídos, la criatura saltó de alegría en mi vientre. 45Y bienaventurada la que creyó, porque se cumplirá lo que le fue dicho de parte del Señor”.  (v40-45).    

Este párrafo revelador termina con el énfasis en su creencia en Dios y en su Palabra.