Thursday, January 9, 2014

CUERPOS CELESTIALES - II

El angel Pudente tiene una tarea muy importante:
“El plan tenía cuatro elementos.  Primero, se necesitaría un profeta para traer las buenas nuevas a los pobres.  En segundo lugar, un nuevo regidor tendría que suceder al rey David.  Entonces una vida perfecta tendría que ofrecerse como el cordero de Dios para expiar los pecados, y en cuarto lugar, un sacerdote tendría que ofrecer este sacrificio.  Pudente prometió hacer lo mejor que pudiera.  No había escasez de trabajadores de buena voluntad, pero Pudente sabía que esto iba a requerir lo mejor que el cielo tenía que ofrecer.  Pudente colgó el teléfono y empezó a trabajar”.
  ¿Podrá cumplir?

Parte dos
Por David Etheridge

Inmediatamente a los dependientes de Cuerpos Celestiales se les dio sus órdenes, y las actividades empezaron en serio.  Un anuncio gigantesco fue pintado en la Plaza.  Los operadores de las máquinas de imprenta furiosamente dieron vueltas a las manivelas para sacar suficientes formularios de solicitud.  Estos fueron distribuidos por los jóvenes, mientras que unas mujeres se prestaron para contestar las preguntas de los solicitantes.  Sus puestos se colocaron de un extremo al otro de la calle de oro.
El ángel en el Departamento de Registros y Estadísticas puso su computadora en alta velocidad para sacar el perfil de trabajo de cada ángel y de cada residente humano a tiempo para las primeras entrevistas.
Por fin el día llegó.  Se anticipaba una gran multitud de solicitantes, y cuatro mesas fueron puestas bajo el anuncio gigantesco en la Plaza.  Cuatro de los más expertos entrevistadores que Pudente tenía a su disposición se sentaron tras los escritorios.  Ángeles de rango mediano y alto se pusieron en todas las colas, excepto por la cola de los sacerdotes, debido a su falta de experiencia.  Para comenzar, había un grupo impresionante de hombres en cada cola, pero muy pronto el entrevistador tras la mesa asociada con una Vida Perfecta llamó a Pudente.  Este tenía un dilema.  Todos los hombres que habían entregado solicitudes tenían vidas muy buenas, pero ninguno de ellos tenía una vida perfecta.  En cambio, los solicitantes angelicales, aunque fueron inocentes de pecado, eran inmortales.  ¿Cómo podían calificar para dar sus vidas como ofrenda para el pecado?  A Pudente le gustaba un buen reto, pero por el momento, él no tenía la respuesta.  Decidió referir el problema al comité, pero mientras tanto, el entrevistador tenía un buen punto. Todos estos solicitantes eran libres para formarse en otras categorías.  Se hizo el anuncio en el alto parlante.
No se perdió nada de tiempo en juntar al personal de consejeros en el cuarto de conferencias de Cuerpos Celestiales, y le dieron a Pudente la palabra.  Junio tenía un rango similar a un general y él sabía ir al grano.  Este pidió que todos ofrecieran sugerencias alternativas, los cuales él escribió en el pizarrón.
No había muchas alternativas, que se diga, pero Junio no iba a darse por vencido fácilmente.  Al rato se dio vuelta hacia el pizarrón y conectó dos puntos con una flecha curva.
“¿Violaría el plan, básicamente, si un individuo hiciera dos funciones?" preguntó Junio triunfantemente.  Se oyó un susurro de aprobación.
Pudente tronó los dedos, diciendo en voz alta, “¡Por supuesto!  ¿Por qué no pensé en eso yo mismo?”
Entonces Pudente regresó a la Plaza con los entrevistadores, y les refirió la idea del comité, y se les dio la nueva a los solicitantes también.
En seguida Pudente puso su atención en la cola de los sacerdotes, la más corta de todas, porque no contenía ángeles.  Ya que se había acordado que un profeta, un sacerdote, o un rey sacrificaría su vida, el negocio en la mesa número cuatro se puso mucho más sencillo.  Dos hombres, que según los registros, habían sido sacerdotes, y que también habían dado sus vidas en conexión con su oficio, fueron llamados al frente.  Estos fueron Abel y Zacarías.  Abel había sido sacerdote a favor de sí mismo, y mientras que su vida era casi intachable, Pudente se preguntó si Zacarías quizás sería un mejor candidato por haber trabajado a favor de otros.  Zacarías había servido en los días del reino dividido.  Este había sido sumamente valeroso en oponerse a los idólatras, quienes le apedrearon en el atrio del templo entre el altar y el Santuario.  ¡Ay, ay, ay!  Esto no iba a ser fácil. 
(…Se continuará…)

Preguntas para estudiar y pensar:
¿Por qué dice que Abel había sido sacerdote a favor de si mismo? 
¿Quién es el Zacarías que se menciona aquí y dónde se encuentra en la Biblia? (Hay mas de un Zacarías.)
¿A qué se refiere “el reino dividido”?

1 comment:

  1. 5. ¿Por qué dice que Abel había sido sacerdote a favor de si mismo? Pues al ofrecer la ofrenda que Dios había mandado.
    6. ¿Quién es el Zacarías que se menciona aquí y dónde se encuentra en la Biblia? (Hay mas de un Zacarías.) El Zacarías que se menciona es el padre de Juan el Bautista, ya que era el sacerdote; si hay otros Zacarías.
    7. ¿A qué se refiere “el reino dividido”? Cuando se divide el reino durante el reinado de Roboam 10 tribus en el norte y 2 al sur.

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